Proyecto comenzó en la Constituição y se extendió por el país y por el mundo, teniendo el deporte como herramienta educativa
Diez años de historia, un crecimiento del 1400 por ciento en cuanto al número de alumnos y que cuenta ya con 23 escuelas repartidas por Portugal y por el mundo y una más en camino. Dragon Force celebra ahora la primera década de existencia, manteniendo las directrices que la orientan desde el 6 de septiembre de 2008, cuando la primera escuela abrió sus puertas en la Constituição: partir de la mística azul y blanca para el crecimiento sostenido de todos los que deseen aprender la cultura del club.
Como telón de fondo, el futbol como herramienta educativa, con el objetivo, además, de detectar y de perfeccionar valores para la formación del FC Porto. Hoy en día, casi el 35 por ciento de los jugadores de los equipos de las divisiones juveniles del club venían de las escuelas Dragon Force. Números que indican el éxito de la apuesta hecha hace diez años y que, en este periodo, ha pasado de 400 alumnos para más de 6000.
El epicentro de todo esto fue el Constituição Park. Fue remodelado pensando en el proyecto desde el inicio e inaugurado dos días antes del arranque, sirvió de tubo de ensayo para una idea mucho mayor que, dos años después, ya se había agrandado a otras cuatro escuelas. Era el inicio de la expansión a nivel nacional.
El crecimiento no sería apenas en número de escuelas, sino también en la oferta de modalidades. En 2012, Dragon Force abre sus puertas al Balonmano, Baloncesto y Hockey sobre Patines, año en el que se crea, también, Dragon Force Social, un proyecto que pretende la integración de niños necesitados o en riesgo de exclusión.
Con el azul cada vez más relevante en el panorama de la formación deportiva en Portugal, era el momento de atravesar fronteras. En 2013, se crean los primeros Camps y Clinics a nivel internacional, con la recepción de grupos de jóvenes entre los 8 y los 18 años para vivir por dentro el universo azul y blanco. El año siguiente comienza verdaderamente la expansión internacional con la apertura de Dragon Force Bogotá, en Colombia.
Transcurrieron tiempos de maduración del proyecto, reforzando su visibilidad, con un programa en Porto Canal; los conocimientos, con la formación para entrenadores; y también la creación de las selecciones nacionales Dragon Force, donde llegaban los mejores de todo el país. Todo esto en 2015, cuando la formación del FC Porto ya recibía cerca del 20 por ciento de los jugadores oriundos del proyecto.
Al año siguiente, las modalidades ofrecidas aumentaron. A las que ya existían, junto con el Billar, se añade la Natación. Es también en 2016 cuando nace Dragon Force Valencia, en España, y se realiza el primer cazatalentos en África: Mozambique es el escenario.
En 2017 se repite la experiencia, ahora en Cabo Verde y ese año se supera la barrera de los 6000 alumnos a nivel global, de los cuales 1600 compiten a nivel nacional e internacional.
Las escuelas ya son 20, con cuatro nuevas este año (Penafiel, Viana do Castelo, Belém y Cascais), en territorio luso y tres en el extranjero (Bogotá, Valencia y Toronto), con la cuarta a la vuelta de la esquina: será en Mozambique y llevará el proyecto, diez años después del lanzamiento, hasta tres continentes.
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