El FC Porto dominó durante los 90 minutos en el Estadio do Dragão, pero necesitó una remontada en el marcador para garantizarse los tres puntos y llegar a los 65 en el campeonato. En la ronda 32, Francisco Moura y Samu (dos) fueron los goleadores de turno en la victoria ante el Moreirense (3-1).

Sin Alan Varela - castigado por novena amarilla en la Liga - y con Nehuén Pérez y Samu en el once titular, el FC Porto dominó la posesión del balón durante la primera media hora y,  pasado el minuto 30, esa iniciativa ofensiva podría haber repercutido en el marcador: tras un saque de esquina por la izquierda, João Mário encontró a Rodrigo Mora en la entrada del área, pero el remate del creativo rozó el ángulo superior de la portería rival. En la respuesta y en su primera aproximación a la portería azul y blanca, el Moreirense se puso en ventaja (0-1).

Los Dragones se lanzaron hacia adelante y consiguieron reponer el empate al cabo de nueve minutos. Marcano encontró a Fábio Vieira por la derecha y este centró con precisión para que Francisco Moura cabeceara al segundo palo (1-1). Hasta el pitido final de la primera parte, solo brilló Cláudio Ramos con una notable intervención (45m).

Tras un arranque de la segunda parte muy parecido al de la primera, con el Moreirense cerca del área de Caio y el FC Porto cercándola, se consumó la remontada en el marcador. Con Gonçalo Borges y Tomás Pérez ya en campo, Fábio Vieira combinó con João Mário por la derecha, el centro del extremo se desvió por el brazo de Maracás y Gustavo Correia señaló falta. Samu no se amilanó y batió al portero antes de celebrarlo con sus compañeros (2-1, 70m).

Martim sustituyó a Eustáquio y vio de cerca cómo el dúo habitual se combinaba para otro gol. Rodrigo Mora recibió el esférico por la derecha, eliminó rápidamente a la oposición que lo cercaba y centró raso para Samu, que recibió con la derecha y fusiló las redes de los cónegos con la izquierda (3-1).

Samu y Fábio Vieira fueron sustituidos por Danny Namaso y por André Franco a los 86 minutos y Gonçalo Borges vio cómo un defensa detenía su disparo a puerta. El 3-1 se mantuvo hasta el triple pitido de Gustavo Correia.